Caminar en el bosque

Caminar en el bosque si que me gusta, poner mi mente en blanco mientras escucho cómo truenan las hojas secas. Dejar que de vez en cuando mi mente tararee "bachata en Fukuoka" o sé de permiso de suspira por que si, por el azul intenso del cielo, por la alfombra amarillo/café por la cual camino o por pensar en alguien que quiero y que me gustaría que caminara esos montes. 

Caminar en el bosque o la montaña si que me gusta por que me invita a abrir los ojos, a estar atenta para encontrar eso que no veo todos los días, las formas de las hojas, el cambio de colores que la vegetación y el clima me regalan, observar que el bosque es de diferentes colores, que hay espacios verdes, amarillos, cafés, rojitos. Ayer descubrí que hay hojitas que se enrollan como caracolitos y que en el bosque también hay caracolitos como en el mar, para mi no es obvio, y por eso me gusta el bosque, por que me regala la sorpresa y el asombro, me regresa a mi niñez, a mis caminatas por la barranca, cuando no tenía miedo y no me cansaba. 

Caminar en el bosque si que me gusta por que ahí me doy permiso de disparar y disparar con mi cámara, porque recuerdo lo aprendido en mis clases y no me da pesar, por que cada piedrita, hoja y uno que otro animalitos se acomoda para que yo lo guarde en mi memoria.

Caminar en el bosque si que me gusta por que en los momentos de cansancio lo único que escucho es el intenso latir de mi corazón, me escucho por dentro. Descubro partes de mi cuerpo que no sabía que existían y que dolían, me doy cuenta que no sé respirar, que el sudor se siente rico y que con paciencia siempre se avanza un poquito más.

Caminar en el bosque si que me gusta porque me hace sentir feliz, me hace querer más y más...